El 4 de febrero se celebra el Día Mundial contra el Cáncer con el objetivo de aumentar la concienciación y movilizar a la sociedad para avanzar en la prevención y control de esta enfermedad.
La fisioterapia juega un papel importante como parte de un tratamiento integral del paciente oncológico, ya que da opción a una recuperación más rápida y a mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Una de las tantas ventajas de la fisioterapia en oncología es que puede aplicarse antes, durante y/o después de una cirugía, radioterapia, quimioterapia, inmunoterapia, terapia hormonal, trasplantes medulares, terapia genética o cualquier otro método para combatir el cáncer.
La Fisioterapia en oncología tiene como objetivo preservar, mantener, desarrollar y restaurar el sistema cinético funcional como también prevenir, mejorar y tratar las secuelas que se producen a causa de cualquier tratamiento oncológico.
¿Qué efectos secundarios se pueden mejorar?
- Fatiga
- Déficit de movilidad y/o equilibrio con déficit funcional
- Espasticidad
- Dolor agudo o crónico
- Alteraciones del sueño
- Disfunciones vésico-esfinterianas (alteraciones del sistema urinario)
- Alteraciones cardiorrespiratorias
- Neuropatías y/o afectación neurológica del Sistema Nervioso Central
- Linfedema y edema
Para tratar los efectos secundarios, los especialistas suelen implementar algunos ejercicios terapéuticos, técnicas de fisioterapia respiratoria, drenaje linfático manual, técnicas de fisioterapia neurológica, masoterapia específica para enfermos oncológicos, digitopresión, neurodinámica y técnicas miofasciales.
Estos son algunos ejemplos de cómo serían los tratamientos según el efecto secundario:
TRATAMIENTO DE LA FATIGA
Este programa es individualizado en el que el paciente debe realizar ejercicios terapéuticos, para luego pasar a aeróbicos durante unos 60 minutos. La recomendación es que se realicen entre tres y cuatro sesiones semanales. (Esto depende del usuario y del tipo de cáncer).
TRATAMIENTO PARA EL DÉFICIT MOTOR Y DEL EQUILIBRIO
El objetivo de este programa es que los ejercicios terapéuticos estén enfocados en la mejora de la movilidad por lo que se realizan movimientos no resistidos que se implementarán posteriormente con ejercicios de fuerza.
TRATAMIENTO DEL DOLOR
Para el dolor, al inicio del tratamiento se realizan fisioterapia de manera individual pero a medida que se avanza se recomiendan clases grupales en el que se trabaje:
- Ejercicios de estiramiento y movilización articular por 30 minutos.
- Ejercicios de estiramiento y ejercicios de fortalecimiento por 30 minutos.
- Ejercicios funcionales y/o actividades de la vida diaria por 40 minutos
- Ejercicios de autocuidado de 30 minutos.
- Ejercicios y necesidades especiales de 30 minutos.
TRATAMIENTO DE LAS DISFUNCIONES VÉSICO-ESFINTERIANAS
Haciendo uso de las técnicas de la fisioterapia del suelo pélvico para restablecer el estado óptimo de la musculatura de esta zona del cuerpo.
TRATAMIENTO DEL LINFEDEMA
Además de las técnicas propias de la fisioterapia, como la terapia descongestiva compleja, consistente en drenaje linfático manual y medidas de compresión, se realizan ejercicios aeróbicos, que incluye resistencia y tonificación con peso progresivo.
Como toda fisioterapia, la oncológica debe mantenerse para lograr una recuperación óptima y para ello se debe realizar un programa de mantenimiento tres veces por semana en la que se hagan ejercicios aeróbicos y ejercicios asistidos por 40 minutos. Los ejercicios aeróbicos deben procurar hacerse al 50% de la frecuencia cardíaca.
CÁNCER DE MAMA
En este tipo de cáncer es en el que más interviene la fisioterapia oncológica, pues varios estudios aseguran que es muy efectivo este tratamiento para prevenir posibles complicaciones o como tratamiento de cicatrices, fibrosis, linfedemas de extremidad superior, o dolor, entre otros.
La técnica más utilizada en este caso es el drenaje linfático manual que estimula la evacuación de líquidos del sistema linfático, disminuyendo la inflamación y mejorando el estado de los tejidos.
CÁNCER PULMONAR
Para este caso el tratamiento que normalmente se implementa es la fisioterapia cardiorespiratoria cuyo objetivo es disminuir la disnea, el dolor, mejorar la calidad de vida del paciente y aumentar progresivamente la tolerancia al ejercicio.
Una fisioterapia de esta clase bien estructurada puede ayudar a mejorar la capacidad pulmonar, disminuir los efectos secundarios de la intervención, prever nuevas recidivas y disminuir tanto la morbilidad como la mortalidad.
SISTEMA NERVIOSO
Es común, tras un tratamiento oncológico que el sistema nervioso sufra algunos efectos como pérdida de la movilidad, de algunas funciones o parálisis de distintos nervios. En este caso la fisioterapia antes, durante y después del tratamiento oncológico puede ayudar a recuperar la mayor movilidad y funcionalidad de las articulaciones y así ayudar a mejorar la calidad de vida del paciente.
Aunque la fisioterapia en oncología no se usa para tratar el cáncer en sí, sino más bien en el tratamiento de sus secuelas; puede ser una forma extremadamente efectiva de ayudar a los pacientes a mantener su calidad de vida. Esto no solo es esencial para su salud mental, sino que los empodera al darles la energía y la independencia para llevar a cabo otros métodos para tratar el cáncer.